- En Perú 4 de cada 10 niñas y niños en el área urbana y 1 de cada 10 en el área rural tienen dificultades en compresión lectora o matemáticas.
- Se estima que 800 mil niñas y niños de áreas rurales no tienen acceso a la educación por la falta de materiales educativos en sus idiomas originarios.
- Piden al estado peruano implementar programas de acompañamiento para los responsables de familia y capacitación en el uso de nuevas tecnologías a las y los educadores.
A raíz de la crisis educativa que generó la pandemia COVID-19, el estado peruano, por medio de la resolución ministerial Nro. 160-2020, implementó la estrategia “Aprendo en casa – Educación a distancia” que tiene como objetivo garantizar el derecho a la educación de las niñas, niños y adolescentes, a través de la difusión de contenidos educativos por radio, televisión e internet. [1]
Ante este contexto, el Grupo de Iniciativa Nacional por los Derechos del Niño – GIN – Perú, en coordinación con la iniciativa Tejiendo Redes Infancia en América Latina y el Caribe, cofinanciada por la Unión Europea, como parte de la estrategia #NiñezPrimero, organizó el Webinar: Retos y desafíos de la Educación y la Interculturalidad de Perú en la nueva convivencia.
En dialogo Flor Aideé Pablo Medina, Ex Ministra de Educación, explicó que en Perú aproximadamente 115 mil niñas y niños entre 3 a 5 años no se encuentran matriculados en el sistema educativo; referente al nivel de aprendizaje 4 de cada 10 en el área urbana y 1 de cada 10 en el área rural tienen dificultades en compresión lectora o matemáticas; problemática que tiende a agravarse con la pandemia COVID-19.
Asimismo Flor Aideé, destacó cuatro aspectos importantes que deben ser considerados para garantizar una educación igualitaria para la niñez; priorizar aprendizajes y cuidado, dar énfasis en la equidad, institucionalizar la educación a distancia, fortalecer y ampliar la educación pública. “Para asegurar el derecho a la educación se tiene que llegar con pertinencia, no hay un servicio educativo que pueda llamarse de calidad si no llega en la lengua, es importante respetar la cultura y hacerle sentir a las niñas y niños que aprenden”.
Al respecto, Elena Burga Cabrera, Ex Viceministra de Interculturalidad, indicó que la pobreza, la falta de equipos electrónicos, la falta de acceso a internet o luz eléctrica, son factores que influyen para que una niña o niño del área rural no puedan ejercer su derecho a la educación.
Otro elemento importante que destacó Burga, fue la falta de presupuesto para diseñar y producir materiales educativos en idiomas nativos; y agregó que en Perú existen aproximadamente 50 pueblos originarios. “Sigue habiendo una brecha enorme, se hicieron materiales y sesiones de capacitación en lenguas originarias pero solo 200 mil se beneficiaron, hay 800 mil niñas y niños a quienes no les llega nada”, explicó.
Sobre ello, Dina Flor, adolescente y reportera bilingüe de Cusco – Perú, lamentó que la mayoría de los materiales no consideran los saberes, las costumbres y la lengua de los pueblos indígenas; “como adolescentes pedimos a las autoridades y maestros que reflexionen sobre la educación intercultural (…) es importante hablar y revalorar nuestras dinámicas familiares de las comunidades campesinas incluyendo temas propios, queremos más apoyo de las autoridades garantizado educación de calidad en las zonas rurales y estabilidad económica de las familias”.
De igual manera, Rosario Salazar Segovia, Directora de AMAHUTA (GIN), expresó que la pandemia COVID-19 visibilizó las dificultades que existen en sistema educativo; por ello, sugirió al estado implementar programas de asesoría y acompañamiento para los padres y madres de familia de las comunidades y capacitar a las y los educadores para que puedan adecuar su enseñanza de acuerdo a las necesidades de la niñez indígena; “necesitamos contextualizar la educación, ello significa tomar en cuenta que las niñas, niños y adolescentes que no viven en un contexto único, sino diferenciado”.
Referente al tema, Juan Martín Pérez García, Coordinador de la Iniciativa #TejiendoRedesInfancia en América Latina y el Caribe, explicó que pandemia COVID-19, agudizó varias problemáticas que afectan la niñez y adolescencia; enfatizó la necesidad de realizar acciones articuladas y exigir mayor inversión para la infancia. “La pandemia nos está recordando que no podemos pensar en medidas nacionales, tenemos que ver las acciones desde una perspectiva regional (…) de otra manera corremos el riesgo de que se profundicen las violaciones de los derechos de las poblaciones excluidas y que persistan las ideas en contra de los derechos de las niñas y niños”.
En el cierre, Ana María Watson Peña, Presidenta del Grupo de Iniciativa Nacional por los Derechos del Niño, enfatizó que la participación de las niñas y niños es un fundamental al momento de diseñar estrategias educativas; principalmente en el contexto de la pandemia COVID-19; “la participación hace al niño y adolescente ciudadano de derechos y permite a los estados brindar respuestas oportunas”, concluyó.
[1] Resolución Ministerial N° 160-2020-MINEDU
Mira el video aquí:
El video está disponible en HD, solicítalo directamente.
Contacto de prensa: Verónica Morales, Oficial Regional de Comunicación/ [email protected]
Acerca de
#NiñezPrimero es una estrategia brinda orientación para la atención de la niñez y adolescencia en situaciones de emergencia.
Tejiendo Redes Infancia, es un proyecto cofinanciado por la Unión Europea que busca contribuir al fortalecimiento y consolidación de una plataforma de defensa de la niñez y adolescencia en 19 países de América Latina y el Caribe. El contenido de esta publicación es responsabilidad exclusiva de Derechos Infancia México A.C. / #TejiendoRedesInfancia y en ningún caso debe considerar que refleja los puntos de vista de la Unión Europea.